Cuando te vi en sueños
te volviste hacia mí,
con un dedo en tus labios
y las cejas levantadas,
sonriente, antes de seguir
cruzando de puntillas
la descuidada habitación
iluminada por la luna
entonces comprendí de repente
que aquello iba a representar mi vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario